El almacenamiento físico, como discos duros, discos externos o memorias
USB, es ideal si necesitan tener control directo de sus archivos y no
depender de internet.
Pero si se daña, se pierde o se llena, podrías perder el acceso a su
información.
El almacenamiento en la nube, como Google Drive o iCloud, guarda sus
archivos en servidores seguros a los que puede acceder desde cualquier
dispositivo con conexión a internet. Es ideal si necesita espacio, copias de
seguridad automáticas y sincronización entre varios dispositivos.
Pero, ¿qué te resulta más cómodo? Si trabajas mucho desde diferentes
lugares o dispositivos, la nube es perfecta. Pero si manejas archivos
grandes o confidenciales, te conviene tener una copia de seguridad física.
Lo mejor sería combinar ambas opciones.
Alexa Hernández
Instagram como AlexaKHZ.