Katy Perry vivió un momento inesperado durante su presentación en Sydney, cuando un fan invadió el escenario mientras cantaba su éxito “Hot N Cold”. Este incidente, que sorprendió tanto a la cantante como al público, dejó claro que la seguridad en conciertos sigue siendo un tema crucial para los artistas.
Mientras Perry daba todo en el Qudos Bank Arena como parte de su gira mundial “Lifetimes” 2025, un fan llamado Johnson Wen se acercó abruptamente y la abrazó, incluso haciendo la famosa danza “floss” sobre el escenario. Perry se alejó y bromeó: “Nunca habrá otro show como este, ¡así que disfrútenlo!”. A pesar de la intervención de seguridad, la salida del fan tardó más de lo esperado, lo que provocó que la cantante preguntara sorprendida: “¿Qué diablos está pasando?”.
Johnson Wen, conocido por sus apariciones sorpresivas en shows para su cuenta de TikTok (@pyjamamann), ya había interrumpido conciertos de The Weeknd y The Chainsmokers. Tras el incidente, la policía de Nueva Gales del Sur lo arrestó y lo acusó de “entrar en un terreno cerrado y obstruir a una persona en el desempeño de su trabajo”. Wen recibió libertad condicional y fue vetado del Sydney Olympic Park por seis meses.
Este evento ocurre mientras Katy Perry continúa promocionando su álbum “143” (2024), que ha recibido críticas mixtas, y tras su controvertido viaje al espacio en abril pasado para revelar la lista de canciones de su gira, un acto criticado por considerarse “turismo de lujo”. La gira seguirá en el Reino Unido a partir de octubre, con un compromiso social al donar parte de las ganancias para apoyar espacios musicales independientes.
En medio de todo, Katy Perry también ha lanzado un mensaje positivo a sus fans sobre cómo enfrentar el odio en redes sociales, demostrando que sigue conectada con su audiencia pese a las polémicas.