Una canción, tres voces y un mensaje que nos sigue abrazando décadas después.
En 1990, justo cuando el pop navegaba entre sintetizadores ochenteros y la inminente llegada del grunge, apareció Wilson Phillips con una balada inesperadamente poderosa. “Hold On” se convirtió en un himno instantáneo para quienes necesitaban un respiro, una señal o simplemente un recordatorio de que “las cosas van a cambiar”. Tres chicas con herencia musical legendaria crearon una de las canciones más motivadoras (y pegajosas) de los 90.
Y sí, aunque muchos las recuerdan como un one hit wonder, lo cierto es que ese único hit bastó para dejar huella en nuestros corazones noventeros.
Tres voces, una misma vibra
Wilson Phillips estaba formado por Carnie y Wendy Wilson (hijas de Brian Wilson de The Beach Boys) y Chynna Phillips (hija de John y Michelle Phillips de The Mamas & The Papas). Con esa genética musical, no sorprende que armonizaran como ángeles y transmitieran una vibra luminosa, muy californiana.
“Hold On”: la canción que necesitábamos (y no lo sabíamos)
Desde sus primeras notas, Hold On se siente como un abrazo emocional. Con frases como “someday somebody’s gonna make you wanna turn around and say goodbye”, esta canción se convirtió en una especie de mantra colectivo. Era pop, sí, pero con propósito. Y justo por eso, fue #1 en Billboard y se volvió parte esencial de toda playlist emocional noventera.
Más que una canción de radio
El impacto de Hold On trascendió los charts. La canción fue usada en películas, series y hasta en discursos motivacionales. Incluso Bridesmaids la rescató para una escena icónica que la reintrodujo a nuevas generaciones. Era un “todo va a estar bien” musical que, seamos honestas, todas necesitamos alguna vez.
¿Y después?
El grupo lanzó más canciones y discos, pero ninguna alcanzó el mismo nivel de éxito. Aun así, Hold On fue suficiente para asegurarles un lugar en la historia del pop. Las tres siguieron caminos distintos, con reencuentros esporádicos, pero su legado sigue vivo cada vez que alguien se siente perdido y necesita escuchar: “Don’t you know, things can change…”
Un hit eterno con un mensaje que sigue vigente
Wilson Phillips no solo nos regaló una canción, nos dio una lección: resistir también es parte del viaje. Hold On no fue solo un éxito del pop, fue una guía emocional en formato de balada. Y por eso, aunque hayan sido fugaces en los charts, siguen siendo inmortales en la memoria popera.