El legendario músico Billy Joel puso fin a su histórica residencia en el Madison Square Garden el pasado 25 de julio de 2024, concluyendo una etapa sin precedentes de 10 años y 150 conciertos que lo consolidaron como un ícono de la ciudad de Nueva York. El espectáculo final fue un evento emotivo y repleto de estrellas que celebró una de las residencias más exitosas en la historia de la música.

Desde su inicio en enero de 2014, la residencia de Joel se convirtió en una cita obligada para neoyorquinos y turistas, vendiendo más de 1.9 millones de boletos a lo largo de una década. El concierto número 150 y final no solo marcó el fin de una era, sino que también reafirmó su estatus como el artista con más presentaciones en la historia del emblemático recinto.

Durante la noche final, Joel, de 75 años, deleitó al público con un repertorio de sus más grandes éxitos, desde “Piano Man” hasta “New York State of Mind”. El espectáculo contó con la participación sorpresa del comediante Jerry Seinfeld, quien se unió al escenario para celebrar al músico.

Un legado musical y un futuro activo

A pesar de concluir este importante capítulo, Billy Joel no ha mostrado signos de retirarse de los escenarios. El artista continúa con una agenda de conciertos activa, con presentaciones programadas en estadios de Estados Unidos junto a otras leyendas de la música como Sting y Stevie Nicks para lo que resta de 2024 y principios de 2025.

Su capacidad para seguir ofreciendo conciertos de alta energía desmiente los rumores infundados sobre supuestos problemas de salud graves. El propio artista ha mantenido un enfoque positivo, centrado en su música y en sus presentaciones en vivo.

La pasión por las motocicletas continúa

Paralelamente a su carrera musical, el artista mantiene activo su proyecto personal, la tienda-museo 20th Century Cycles, ubicada en Oyster Bay, Long Island. Este espacio, abierto en 2010, alberga su extensa colección personal de motocicletas clásicas y personalizadas, la cual exhibe al público de forma gratuita.Contrario a informaciones falsas, la tienda no ha anunciado su cierre y sigue funcionando como un reflejo de una de las grandes pasiones de Joel fuera de la música. El lugar se ha convertido en un punto de interés para los aficionados al motociclismo y seguidores del cantante, mostrando una faceta más personal del “Piano Man”.