La espera está por terminar, el próximo 10 de julio de 2025 se presentará al mundo la tercera generación del Mazda CX-5, uno de los SUV más emblemáticos de la firma japonesa.
Se espera que el nuevo modelo tenga un diseño más afilado, mayor espacio interior y una propuesta tecnológica centrada en el conductor. El nuevo Mazda CX-5 promete redefinir su segmento sin perder la esencia que lo ha convertido en un favorito global desde su debut en 2012.

La firma japonesa ha optado por una evolución refinada del lenguaje Kodo, manteniendo la elegancia que caracteriza al SUV pero con líneas más tensas y proporciones más marcadas. La firma develó algunas imágenes en las que se aprecian unos faros delanteros más delgados, una parrilla más cuadrada y una silueta estilizada que transmite mayor aplomo y dinamismo.
De igual manera, se espera que en el interior mantenga un habitáculo más amplio y despejado, con un enfoque minimalista que prioriza la ergonomía y conectividad. La firma japonesa promete una experiencia de conducción más intuitiva, con materiales de alta calidad y una interfaz digital optimizada que reduce distracciones y mejora la interacción con el vehículo.
Tecnología centrada en el ser humano para Mazda CX-5
Fiel a su filosofía de “human-centric technology”, el CX-5 2026 integrará sistemas avanzados de asistencia a la conducción, como frenado autónomo de emergencia, mantenimiento de carril y control de crucero adaptativo. Además, se espera una nueva generación del sistema Mazda Connect, con actualizaciones inalámbricas y compatibilidad ampliada con servicios de conectividad.

Respecto a la motorización, aún no se ha confirmado de manera definitiva. Pero se espera que debute con motor a combustión. Actualmente el modelo porta en México el SKYACTIV de 2.5 litros con potencias de 188 y 227 caballos de potencia.