El director de cine Woody Allen ha sorprendido al declarar que le encantaría volver a dirigir al actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a quien calificó como un “muy buen actor” y “un placer” durante el rodaje de su película de 1998, Celebrity.
La revelación tuvo lugar durante una aparición de Allen en el podcast Club Random de Bill Maher. El cineasta recordó su experiencia trabajando con Trump en un cameo para su comedia, donde el entonces empresario se interpretaba a sí mismo. “Fue muy educado, dio sus marcas, hizo todo correctamente y tenía un verdadero talento para el mundo del espectáculo”, relató Allen.
Lejos de dejarlo como una simple anécdota, el director expresó su deseo de repetir la colaboración: “Si me dejara dirigirlo ahora que es presidente, creo que podría hacer maravillas”.
Desacuerdo Político, Elogio Profesional
A pesar de sus elogios, Woody Allen se apresuró a aclarar que su admiración es puramente profesional y no se extiende a la arena política. “Estoy en desacuerdo con muchas, casi todas, no todas, pero casi todas sus políticas”, afirmó, añadiendo que votó por Kamala Harris en las elecciones de 2024.
El director también compartió su perplejidad ante la decisión de Trump de entrar en la política. “La política no es más que dolores de cabeza, decisiones críticas y agonía”, comentó. “Este era un tipo al que solía ver en los partidos de los Knicks, le gustaba jugar al golf y juzgar concursos de belleza… Por qué alguien querría de repente tener que lidiar con los problemas de la política, es algo que me supera”.
Una Visión Opuesta a la de Otros Directores
La postura de Allen contrasta fuertemente con la de otros cineastas de Hollywood. Recientemente, el director de Mi Pobre Angelito 2, Chris Columbus, declaró que deseaba poder eliminar el cameo de Trump de su película de 1992, calificándolo de “una maldición”.
Estas declaraciones de Woody Allen, un director ya de por sí controvertido y en gran medida aislado de la industria, añaden una nueva capa de polémica a su figura pública, mostrando una vez más su disposición a expresar opiniones que van a contracorriente del sentir general de Hollywood.